Otro hongo místico es el Amanita Muscaria, comúnmente lo conocemos como el hongo de Santa Claus o de la Navidad, ya que es rojo con pequeños puntos blancos.  Este hongo produce ácido iboténico y muscimol, sustancias que pueden provocar experiencias psicodélicas dependiendo de la dosis y forma de administración. 

Este hongo crece principalmente en bosques donde hay pinos, ya que su micelio crea una simbiosis con las raíces de los pinos, compartiendo nutrientes entre ellos. Crecen principalmente en climas fríos, y la mayor parte de sus hallazgos ha sido en Siberia, Europa y Norteamérica. 

En la época de los vikingos, antes de las batallas, muchos comían las cabezas del hongo Amanita, ya que sus efectos les daban una sensación de euforia, haciendo que no tuvieran miedo y se sintieran invencibles. 

En Siberia, que ahora es gran parte de Rusia, se originó el término Chamán (Shaman), que significaba líder espiritual, curandero y visionario. Los chamanes en Rusia cazaban a los renos que habían consumido este hongo, para extraer sus propiedades psicoactivas y poder llevar a cabo sus rituales ceremoniales. 

En sus usos ceremoniales, se creaba un trago, conocido como un elixir y en otras partes como un afrodisiaco llamado Soma, o la bebida de los Dioses. En el Rig Veda del hinduismos se describía el trago Soma como una bebida capaz de traer poderes divinos a quien lo consumiera.

De ahí, este versículo: 

Hemos bebido Soma y nos volvimos inmortales;

Hemos alcanzado la luz, los Dioses nos descubrieron.

Ahora, ¿qué daño o malicia podría contra nosotros?

¿O qué? Tú mortal, ¿estás decepcionado?

Incluso en el Rig Veda menciona como los campesinos acudían al hogar del chamán para comprar su orina, con el fin de tener una experiencia psicodélica. 

Aunque hace falta mucha investigación respecto a este hongo, existen casos de personas que han curado adicciones a opiácidos, alcohol, benzodiacepinas, entre otras adicciones. No se recomienda su uso sin una investigación profunda e informada, ya que si no se prepara de forma adecuada, este puede ser tóxico y hasta mortal.